
Ciudad de México, 10 de junio de 2025.
Hombres y salud mental: rompiendo el silencio de la fortaleza
- Los principales desórdenes de salud mental en hombres son ansiedad y depresión
- El autocuidado y crear comunidad, esenciales para el bienestar
La salud mental es esencial para alcanzar el bienestar personal y en comunidad, hoy más que nunca cobra importancia su atención y cuidado, no obstante, para los hombres ha sido un tema históricamente silenciado, debido a los estereotipos sociales que asocian la masculinidad con la fuerza, la invulnerabilidad y el autocontrol emocional.
Desde niños, muchos aprenden a reprimir sus emociones y a resolver sus problemas a solas. Esta presión constante por mantener una imagen de fortaleza puede generar sentimientos de ansiedad y depresión, que a menudo no se expresan ni se tratan adecuadamente por miedo al juicio o a ser percibidos como débiles, indicó Roberto Mercadillo Caballero, psicólogo del Centro Neurológico y de Sueño.
Señaló que casi el 80 % de los hombres en el mundo han reportado tener un desorden neuropsiquiátrico y no haberlo dicho, incluso al ser cuestionados sobre ello; aproximadamente el 40% jamás ha ido a una consulta de tipo psicológico o no ha hablado de lo que siente, y 20% de ellos nunca pretenderá ir.
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2023 se registraron 8 mil 837 fallecimientos por suicidio, de los cuales el 81.1 % fue de hombres y el 18.9 % mujeres. Más allá de la estadística, esto pone como prioridad el promover y atender la salud mental de los hombres.
Cuando hablamos de una enfermedad del cuerpo, sabemos que hay un órgano que no está funcionando adecuadamente y, una vez hallado el desequilibrio, puede haber una reparación o cura. “En el caso de la mente, es un poco diferente, es cierto que tenemos al sistema nervioso que nos permite pensar, sentir, actuar, y sabemos cómo tendría que funcionar adecuadamente. Pero también es cierto que ese sistema procesa la información que viene de fuera del mundo: lo que vemos, lo que oímos, lo que captamos y lo que recordamos. A veces el órgano está aparentemente intacto o se equilibra con algún fármaco, pero hay muchos otros elementos que están afuera y no necesariamente se curan así”, explicó el especialista. Cuando se presenta algún problema a este nivel, hablamos de desórdenes neuropsiquiátricos.
Los dos principales desórdenes de salud mental en los hombres son ansiedad, en primer lugar, y depresión, en segundo. Se estima que 10.7 % de hombres y 19.5 % de mujeres padece depresión, mientras que 15 % de hombres y 23.2 % de mujeres padece ansiedad. Esto puede atribuirse a factores biológicos, sociales y culturales, pero también se debe considerar que los hombres buscan menos ayuda profesional debido a estereotipos de género, esto puede incidir en las cifras.
Mercadillo Caballero indicó que un estado de bienestar y ausencia de enfermedad incide en la forma en que pensamos, sentimos, decidimos y en cómo interpretamos el mundo; por el contrario, si tenemos algún problema de salud mental no tomamos las mejores decisiones.
Señaló que es primordial crear una conciencia del autocuidado y que los niños vean a los adultos de su familia actuar en este sentido.
El también neurobiólogo destacó la importancia de la comunicación: “En la medida en que los hombres aprendamos a escuchar con atención, vamos a hacer menos juicios, y en la medida en la que hagamos menos juicios, vamos a entender que cuando nosotros hablemos, no necesariamente nos tienen que enjuiciar y nos vamos a sentir con menos estigma y con menos miedo de hablar de lo que sentimos”.
Explicó que hay varios signos que indican que un hombre tiene algún desorden de salud mental, como son: incapacidad para convivir, incluso con gente de confianza, insomnio, falta de energía, falta de interés por cosas que comúnmente disfrutaban, como convivir con sus amigos o hijos, o pasear a su mascota, descuidar su apariencia, incremento en el consumo de alcohol, tabaco u otro tipo de sustancias, y manifestar hostilidad, la cual puede convertirse en violencia.
En caso de que se presente alguno de estos signos, es importante acudir a recibir ayuda. El especialista indicó que el primer acercamiento se puede dar con un asesor escolar o con un médico general, quienes deberán valorar al adolescente o al adulto y recomendarle acudir con un psicólogo o psiquiatra, en caso de ser necesario.
Recalcó la valía de los grupos de autoayuda de hombres, pues en esos espacios pueden intercambiar opiniones y experiencias en un entorno de honestidad y sin juicios. Aclaró que es muy importante elegir el grupo adecuado para no caer en manos de gente sin preparación y con poca ética. “Idealmente estos espacios tienen que ser guiados y resguardados por profesionales que saben cómo escuchar y cómo guiar una conversación de manera más constructiva y productiva. Acérquense a centros universitarios, a clínicas de atención psicológica y psiquiátrica y ahí encontrarán grupos de apoyo entre hombres, entre masculinidades para que discutamos juntos cómo podemos actuar mejor por nuestra salud mental”.
Roberto Mercadillo invitó a los hombres a normalizar expresar sus emociones y buscar su bienestar. “Los hombres podemos cuidarnos y aceptar cuando no podemos hacerlo solos; buscar ayuda. Está bien sentirse bien”, puntualizó.