Grillos, el snack rico y nutritivo

Los grillos son un tipo de insecto comestible, consumido en varias regiones de América Latina, Asia y áfrica. A menudo se utilizan como ingrediente en pastas, salsa, panes, tortillas y como botanas, debido a su sabor único.

¿Sabes en qué benefician a nuestro organismo?

Alta fuente de proteínas. Su contenido proteico supera al de muchas carnes tradicionales, como el pollo y la carne de res. Una porción de grillos secos puede proporcionar entre 60% y 70% de su peso en proteína, lo que los convierte en una opción ideal para quienes buscan aumentar su ingesta proteica.

Ricos en vitaminas y minerales. Contienen una gran cantidad de vitaminas y minerales que son esenciales para el funcionamiento del cuerpo: hierro, magnesio, calcio, fósforo y las vitaminas del complejo B, como la B12, crucial para el sistema nervioso y la producción de glóbulos rojos.

Ácidos grasos saludables. Contienen omega-3 y omega-6, que son vitales para la salud cardiovascular y cerebral. Ayudan a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, mejoran la circulación sanguínea y contribuyen al mantenimiento de la función cerebral.

Bajos en calorías. Son una alternativa perfecta a las fuentes de proteína más calóricas, como las carnes rojas o procesadas, ayudando a controlar el peso sin sacrificar la nutrición.

Ricos en fibra. La fibra dietética presente en los grillos contribuye a la salud digestiva, promoviendo un buen tránsito intestinal y ayudando a mantener niveles saludables de colesterol; también puede aumentar la sensación de saciedad, lo que ayuda a controlar el apetito y prevenir el sobrepeso.

Propiedades antioxidantes. Al igual que otros insectos comestibles, los grillos contienen compuestos antioxidantes, que ayudan a combatir el daño celular causado por los radicales libres. Esto puede reducir el riesgo de enfermedades crónicas y promover un envejecimiento más saludable al proteger las células del cuerpo de daños oxidativos.

Sostenibilidad ambiental. Uno de los mayores beneficios de los grillos es su bajo impacto ambiental. Criar grillos para consumo humano requiere significativamente menos recursos que la ganadería convencional. Se necesita menos tierra, agua y alimento para producir una cantidad equivalente de proteína, lo que los convierte en una opción mucho más sostenible. Además, la cría de grillos emite menos gases de efecto invernadero, lo que contribuye a la lucha contra el cambio climático.

Bajo en grasas saturadas. A diferencia de muchas carnes animales, los grillos son bajos en grasas saturadas, lo que los convierte en una opción más saludable para aquellos que buscan reducir su consumo de grasas dañinas para la salud cardiovascular.

En Essenzia traemos para ti grillos criados en granjas, en el estado de Querétaro, alimentados únicamente con verduras, frutas y granos orgánicos, lo que incrementa su valor nutricional. Además, están preparados con aceite de oliva por lo que consumirás una botana sin grasas que puedan perjudicar tu salud.